Los habitantes
ancestrales de la Cordillera de la Costa son los mapuche-huilliches (hombres
del sur). Una de las principales características de su forma de
vida es la doble dependencia del mar y del bosque, componentes y agentes
estructurantes de su cultura. De estos ambientes los huilliches obtienen
alimento, vivienda, combustible, recreación. Encuentran, además,
elementos de expresión cultural como plantas con propiedades medicinales
y ceremoniales y lugares donde desarrollan ritos y manifestaciones religiosas.
En el caso de la Cordillera de la Costa de la Xª Región, todo este proceso de despojamiento se vió agravado por el continuo aprovechamiento de particulares inescrupulosos que, amparados en un Estado ineficiente en la aplicación de las normativas que pretendían proteger las condiciones de vida de las comunidaes habitantes de la zona, llevaron adelante sucesivas “apropiaciones en el papel” (Correa et al. 2001, ms) que han provocado, hasta la fecha, el establecimiento de condiciones de vida desmejoradas en el ámbito económico, social y cultural. Los habitantes huilliche de la Cordillera de la Costa fueron obligados a convertirse en ciudadanos de un país que no era el suyo y, además, se les entregó el estatus de vida de ciudadanos de segunda categoría. “El desafío de la situación actual en consecuencia, dice relación con definir si las políticas de Estado hacia los pueblos indígenas de Chile deben ser las que históricamente han fracazado, o hay propuestas diferentes para orientar las políticas de Estado hacia el mundo indígena. “Surge la pregunta de si el mundo indígena tiene también una alternativa propia, una nueva proposición para relacionarse con el Estado. Esta respuesta corresponde a los indígenas de Chile” (Aylwin, 1997) |
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